Todos tenemos más o menos una idea de lo que es un DUI simple, que es cuando alguien es sorprendido conduciendo en estado de embriaguez, no pasa el test de alcoholemia y tiene que hacer frente a determinadas sanciones que están previstas en el Código Penal de California, por haber manejado con un nivel de BAC, esto es, de alcohol en la sangre, superior al límite establecido en las leyes.
Pero un escenario bastante distinto es cuando un individuo es sorprendido conduciendo después de haber ingerido alguna clase de sustancias que pueden afectar sus habilidades y sus reflejos para poder reaccionar ante cualquier eventualidad que pueda presentarse en la carretera. Y es más que probable que muchos se sorprendan por el hecho de que muchas medicinas que son de venta libre, como las que se toman para tratar un resfriado o una alergia producen ese efecto y cuando las tomamos y a continuación conducimos, estamos quebrantando las leyes. La causa de ello es que algunos de los principios farmacológicos con los que son elaborados provocan somnolencia. Por esta razón, cuando vamos a tomar alguna medicación, es necesario que leamos la etiqueta del empaque, porque es posible que contenga alguna advertencia en este sentido, y la ley en California obliga a que ello sea reflejado en los empaques, para que los consumidores estén conscientes de que tomarlas y luego ponerse detrás de un volante constituye una conducta ilícita de DUI por encontrarse bajo los efectos del uso de una droga.
De modo que, un DUI por consumo de sustancias no está relacionado únicamente con sustancias ilegales, sino que también se configura esta conducta cuando se ha consumido una sustancia legal, e incluso de libre venta, así que no se trata de una conducta ilícita que solo cometen los adictos a sustancias ilegales o controladas, sino cualquier sujeto común, que quiera curar su alergia o una gripe.
Algo que se debe advertir es que muchos individuos piensan que, porque tienen un récipe médico válido, expedido por un médico que tiene una licencia profesional para ejercer en California, tienen una justificación válida y legal y se librarán de una acusación por esta clase de DUI, pero nada más alejado de la realidad, ya que para que se entienda ejecutado lo único que se necesita es ser sorprendido conduciendo después de haber ingerido una simple medicina, aunque se tenga un récipe médico, porque ya el propio empaque contiene esa advertencia, ya que lo relevante es que el principio activo de la misma es capaz de influir en la capacidad del individuo para manejar, ya sea que se trate de un antialérgico que contiene efedrina o de algo un poco más fuerte como el Valium o como el vicodin, que son medicamentos para regular el sueño o para dolores fuertes.
Y es cierto que no todos los organismos reaccionan de la misma manera frente a determinados medicamentos, pero la conducta se entiende ejecutada, no porque efectivamente el sujeto se encuentre drogado al momento de ser sorprendido manejando, sino que los haya tomado y luego haya tomado un volante en sus manos. Las sanciones que se pueden imponer por esta clase de conductas no sólo son de tipo administrativo como que su permiso de conducir sea suspendido por un lapso que puede ser como mínimo de seis meses, en caso de que el sujeto posea antecedentes por la misma conducta, sino que además, es posible que deba ir a la cárcel, y que tenga que pagar una multa judicial, junto con otros efectos negativos como el de tener un récord criminal que podría impedir encontrar un nuevo trabajo, una licencia profesional y hasta rentar un inmueble como vivienda.
¿Cómo conseguir la ayuda legal que se necesita?
Cualquier escenario en el que un sujeto se tenga que enfrentar en Los Angeles a una acusación de tipo penal siempre será estresante y traumática, por todo lo que ello puede conllevar, no sólo desde el punto de vista técnico y legal, sino por la influencia que ello puede tener a nivel personal, familiar, social y profesional, y es que se encuentran en riesgo no sólo el privilegio para poder manejar, sino también su libertad y su futuro, y si quiere protegerlo, lo que tiene que hacer es conseguir la ayuda legal que sólo le pueden brindar verdaderos abogados penalistas especializados en DUI, como los de Los Angeles DUI Lawyer, porque a eso nos dedicamos todos los días, y conocemos a la perfección los procedimientos, los argumentos y la forma en que se debe negociar con la representación fiscal, para lograr el mejor resultado posible, así que lo único que usted tiene que hacer es ponerse en contacto con nuestra firma legal a la brevedad posible.
¿Cuándo se entiende que un sujeto está ejecutando esta conducta ilegal?
Según lo dispuesto en las normas, manejar estando bajo la influencia de una sustancia que puede considerarse una droga, es porque se ha consumido una sustancia que podría tener efectos sobre:
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El sistema muscular.
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El cerebro.
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El sistema nervioso central.
Todos los cuales influyen de manera sustancial sobre la capacidad que puede tener un sujeto para conducir cualquier vehículo de forma segura, teniendo el razonable y debido cuidado que se espera de él.
No obstante, hay que tomar en consideración que el término drogas incluye:
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Sustancias ilegales como las metanfetaminas, cocaína o heroína, pero sólo hemos mencionado las principales, porque existen otras sustancias que encuadran dentro de esta definición.
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Ciertas medicinas que han sido recetadas legalmente.
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Algunos medicamentos que son de libre venta pero que influyen sobre las facultades y habilidades de aquellos que los consumen.
Otro término que vale la pena explicar, a los efectos de las leyes de California, manejar o conducir un auto es que se tiene un control consciente y deliberado, en todo momento con intencionalidad, del auto para que éste se desplace a nuestra voluntad. Es por ello que es el sujeto quien provoca que se muevan las ruedas de un auto y el auto se desplace, aunque se trate de una distancia corta. De modo que si un sujeto es sorprendido por haber consumido drogas pero se encuentra sólo sentado delante del volante, sin que el auto se esté moviendo, no habrá ejecutado esta conducta ilícita.
Por ello, para que esta conducta ilícita se entienda ejecutada, lo que se requiere es que el individuo, por causa del consumo de esa sustancia tenga sus facultades físicas o mentales disminuidas hasta un nivel en que le sea imposible manejar teniendo el cuidado o las precauciones que sí tendría un sujeto en condiciones normales, frente a las eventualidades que pueden presentarse en una situación parecido. Siguiendo esta explicación es posible que la habilidad y la capacidad para conducir de un sujeto sean afectadas por causa de consumir:
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Toda clase de drogas, bien que se trate de ilegales, con prescripción médica o que sean de libre venta.
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Una mezcla de alcohol y de drogas.
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Sufrir una adicción a cualquier clase de drogas, salvo que se encuentre en un tratamiento para su adicción en un programa debidamente aprobado.
La real denominación de esta conducta ilícita, por su nombre en inglés, es DUID. Hay que advertir que las leyes no establecen una limitación legal para los niveles de drogas ingeridas, y la causa de ello es que los individuos que se especializan en esto no han podido llegar a un consenso sobre a partir de qué nivel una concentración dentro del sistema circulatorio puede incapacitar a un individuo para manejar consciente y deliberadamente, teniendo el control total de su auto. Por esa razón, cualquiera sea el nivel de intoxicación, si en el test químico, un sujeto podría ser acusado de DUID.
Un escenario podría ser el de un sujeto que sufre de dolores crónicos, para el cual lleva años tomando Vicodin por prescripción médica válida, y necesita tomar una específica dosis, que probablemente pudiera ser considerada muy alta para un individuo que no sufra de esa dolencia, pero que sólo así le produce los efectos deseados, pero por causa de tener tanto tiempo tomándolo, la dosis terapéutica que toma no afectan sus habilidades para manejar, en cambio una dosis como esa si podría tener ese efecto en un sujeto normal. Por eso no es posible determinar un nivel legal de limitación a la dosis consumida que un individuo pueda contener en el sistema sanguíneo. Y es precisamente por eso que no sucede lo mismo con las bebidas alcohólicas, en las que sí existe un límite legal de concentración sanguínea, que es igual al 0.08%, mientras se maneja, para ser acusado de DUI.
¿Qué sustancias son las que llevan a una acusación de DUID en este Estado?
Una acusación de DUID puede fundamentarse en haber consumido:
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Metanfetaminas.
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Derivados del opio como el Oxycontin o el Vicodin.
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Marihuana.
Pero realmente una acusación de esta clase puede basarse en cualquier sustancia o medicina que influya en los sistemas muscular, cerebral o nervioso de un sujeto, aunque se requiera para la recuperación de la salud de quien conduce.
¿Cómo se realiza la investigación por manejar bajo los efectos de una droga?
En caso de que un individuo maneje un auto habiendo consumido una droga, lo normal es que su habilidad para controlar su coche se vea alterada, por lo que su grado de control y de precaución al manejar está cuestionada. No obstante, no ha sido posible hasta hoy desarrollar un test que sea confiable para poder medir el grado en que se han deteriorado sus facultades para conducir.
Esto no sucede con el grado alcohólico, ya que este se puede medir fácilmente, tanto en el aliento como en la sangre, y se trata de test muy confiables que demuestran que tan deteriorada puede estar la habilidad de un sujeto para manejar, de modo que es una prueba que produce resultados objetivos, mientras que con el consumo de una droga no sucede lo mismo. Por ello, los agentes actuantes deben ser muy cuidadosos al observar un conductor del que se sospeche que ha consumido una droga y se encuentra manejando bajo los efectos de la misma, como puede ser la manera de comunicarse, la coherencia, la manera en que tenga los ojos, si están llorosos o enrojecidos, si puede conservar la estabilidad al caminar, si está sudando en exceso, si su lengua está blanca o pastosa, así como otras señales. En conclusión, que las detenciones las efectúan los agentes policiales en caso de conducción, después de consumir drogas, se realizan con base en pruebas subjetivas, al contrario de la objetividad que se puede obtener de un test químico que mide la concentración de alcohol.
Normalmente, las evidencias en estos casos serán los testimonios que rindan los agentes policiales que hayan efectuado la detención, o los terceros que hayan presenciado la manera en que el sujeto estuviera conduciendo. En caso de que un sujeto haya sido arrestado por DUI, esto es, bajo los efectos de bebidas alcohólicas, pero logró pasar el test de alcoholemia y sin embargo no logró pasar las pruebas sobre sobriedad, también llamadas ‘FSTs’, como lograr el equilibrio sobre un pie, caminar o dar un giro, podría ser un indicio para el agente policial de que en vez de encontrarse bajo los efectos del alcohol, en realidad ha consumido drogas.
En estos casos, lo normal en California es que los agentes policiales sospechen del consumo de una droga y llamen a expertos en el reconocimiento de su uso, que reciben el nombre de DRE, para que investiguen al sospechoso. Se trata de expertos que tienen la capacidad de identificar los efectos del consumo por medio de un test que consiste en la realización de doce pasos, entre los que se encuentran la revisión de la vista, el control sobre el pulso del individuo, pruebas sobre la reacción muscular, la búsqueda de orificios producidos por una inyectadora, y otros más. También hay una parte en la que se interroga al sujeto sobre usa drogas, exigirle que vuelva a realizar los test de sobriedad, y hasta pedirle que se deje realizar un examen de orina o sanguíneo y en todos estos exámenes es posible que se comentan errores de los que pueda aprovecharse el abogado criminalista especializado para construir la debida defensa.
¿Qué hacen normalmente los agentes policiales ante la sospecha de un DUID?
Lo que normalmente van a hacer los agentes policiales en estos escenarios es pedirle al individuo que se someta a un test sanguíneo para que pueda analizarse si se encuentra o no alguna sustancia en su organismo. En el Estado de California pasa algo muy particular y es que cuando un individuo obtiene su permiso para manejar, se entienda que ha dado su consentimiento implícito para que en el futuro le sea practicado cualquier test, bien sea en la sangre o en el aliento cuando sea detenido por sospecha de DUI. Y en caso de que se niegue a someterse a ella, las consecuencias podrían ser:
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Suspenderle el permiso para manejar.
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Sufrir un incremento en las penas que podrían resultar de una acusación por DUID.
Hay que advertir que en caso de ser acusado de DUID habiendo estado envuelto en un incidente de tráfico, aunque esté desmayado, los agentes policiales podrían solicitar una orden judicial para extraerle una muestra para someterla a un análisis de sangre y determinar si el sujeto se encontraba bajo los efectos de una droga consumida, y puede serle tomada en la misma emergencia del hospital o en el centro médico al que haya sido trasladado para ser tratado, luego de obtener la respectiva orden de un juez.
¿Cuáles son los hechos que debe demostrar la representación de la Fiscalía a los fines de que se dicte una convicción por DUID?
La representación de la Fiscalía tendrá que demostrar, además del hecho de que la sustancia se encontraba en su sistema circulatorio del procesado mientras manejaba, que al momento de manejar se encontraba inhabilitado como consecuencia de haber consumido una sustancia, por lo que no le era posible tener el grado de atención y de cuidado que tendría un individuo sobrio en la misma situación. Esto normalmente es algo bastante difícil de demostrar para la Fiscalía, sobre todo si se trata de una sustancia que puede ser detectada en los organismos, aunque haya pasado mucho tiempo desde que se consumió, incluso aunque los efectos hubieran desaparecido, por lo que sería cuesta arriba demostrar que las facultades para manejar se encontraban o no disminuidas al momento en que fue detenido. Un caso es el del consumo de cocaína, que puede permanecer en el sistema de un individuo por alrededor de treinta y cinco horas, y en el caso de la marihuana es peor, porque puede ser detectada inclusive hasta en los posteriores treinta días a haber sido consumida.
¿Qué penas se imponen al procesado encontrado responsable por DUID?
Según las leyes de California, el DUID, generalmente, es calificado como delito menor, aunque si concurren con los hechos determinadas características, es posible que se convierta en felonía. Las penas que se imponen al procesado por DUID son las mismas que se imponen a un procesado que sea declarado culpable de un DUI simple, esto es:
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Libertad condicional sumaria con una duración entre tres y cinco años.
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Asistir obligatoriamente a una escuela sobre DUI aprobada.
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Suspenderle el permiso para conducir.
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Cárcel por un lapso que puede llegar a seis meses.
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Multa judicial que puede ascender a $1.800 si es la primera vez que es condenado por ello.
En caso de que sea la cuarta o subsiguiente vez que el imputado es sorprendido en esta conducta ilícita; o que tenga una convicción anterior por una felonía por DUI; o que otro sujeto haya resultado lesionado gravemente o que haya muerto, por causa de la manera en que conducía el imputado bajo los efectos del consumo de drogas; o es la tercera o subsiguiente vez que el sujeto está involucrado en un DUI con lesiones a otros, entonces será juzgado como felonía y las penas que se pueden imponer son:
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Cárcel hasta un período que puede llegar a cuatro años.
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Que se suspenda o se revoque el permiso para manejar por un lapso de 1 año o más.
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Multas judiciales que se encuentran entre los $1.000 y los $5.000.
¿Existen otras consecuencias que se deriven de una convicción por DUID?
En caso de que el imputado sea condenado por DUID, no se trata sólo de que tenga que cumplir las sanciones que le imponga la Corte, sino que se derivan otros efectos que a largo plazo pueden afectar la vida del individuo, porque va a adquirir un récord criminal que quedará registrado en un registro que es público, que es verificado constantemente por cualquier institución que se interese en el pasado de un individuo, a la hora de que se presente para como candidato a un puesto laboral o para un puesto en una institución universitaria, incluso para solicitar una licencia para ejercer una profesión, para pedir una beca o un préstamo bancario y hasta para rentar una vivienda, porque lo más probable es que nadie tenga la intención de contratar con un ex-convicto.
Además, ello quedará en el registro de conducción, lo que afectará grandemente sus posibilidades de contratar con las empresas aseguradoras de autos, lo cual es un requisito obligatorio en California para poder conducir, y en caso de que logre contratar con alguna, es seguro que la prima que deba pagar por su contrato sea el doble o el triple de una prima normal.
A nivel personal, unos antecedentes como estos podrían influir en tu contra en un juicio por divorcio o en una discusión legal por la custodia de un hijo.
¿Hay argumentos defensivos de uso común en esta clase de acusaciones?
Hay que tomar en consideración que la mayoría de las acusaciones de DUID tienen su base en gran medida en la forma en que los oficiales actuantes percibieron los hechos y realizaron la detención, de modo que puede decirse que se basan en la subjetividad de los mismos, y en la manera en que narren ante la Corte lo que puedan recordar de la detención, ya que es posible que entre el arresto y la audiencia ante el Tribunal haya pasado mucho tiempo y eso, sin duda, puede jugar a favor de la defensa, si se cuenta con abogados penalistas especializados en esta clase de conducta ilícita, que son los único con la capacidad que se necesita para poder seleccionar los argumentos necesarios para debilitar esa percepción, y por ende, el caso de la Fiscalía.
Ahora bien, entre los argumentos defensivos que más se usan para impugnar una acusación como ésta, podemos señalar:
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El imputado exhibió síntomas al instante de su arresto que no tuvieron nada que ver con el consumo de drogas.
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La detección de la sustancia en el organismo del procesado se debió a un consumo que fue muy anterior al momento de ser detenido.
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La intoxicación del imputado fue involuntaria.
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El resultado del test químico no fue preciso.
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El imputado no se encontraba manejando al momento del arresto.
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